Carlos Alcaraz asegura la jubilación de sus padres con un contrato publicitario de 285 millones de dólares

Madrid, 18 de julio de 2025 – Carlos Alcaraz, la joven estrella del tenis español, ha dado un paso monumental no solo en su carrera deportiva, sino también en su vida personal, al asegurar el futuro económico de sus padres con un acuerdo publicitario récord de 285 millones de dólares. El tenista de 22 años, conocido por su humildad y dedicación, ha firmado un contrato con una marca internacional de renombre, cuyo nombre aún no ha sido revelado, y ha declarado que su principal motivación es permitir que sus padres, ambos camareros, disfruten de una merecida jubilación.

“Lo hice todo por ellos. Es hora de que vivan en paz. Ya han trabajado bastante duro para mí… ahora me toca cuidarlos”, afirmó Alcaraz en una emotiva entrevista tras el anuncio del acuerdo. Sus palabras reflejan el profundo agradecimiento hacia sus padres, quienes sacrificaron mucho para apoyar su carrera desde que era un niño en El Palmar, Murcia.

El contrato, uno de los más lucrativos en la historia del deporte español, no solo consolida a Alcaraz como una de las figuras más influyentes del tenis mundial, sino que también destaca su compromiso con sus raíces y su familia. Según fuentes cercanas, el acuerdo incluye campañas globales, patrocinios exclusivos y la participación en eventos de alto perfil, lo que refuerza la posición de Alcaraz como un ícono tanto dentro como fuera de la pista.

Los padres de Alcaraz, Álvaro y Virginia, han sido figuras clave en su ascenso al estrellato. Trabajando incansablemente como camareros, siempre apoyaron los sueños de su hijo, llevándolo a torneos y brindándole el soporte emocional necesario para competir al más alto nivel. “Ellos lo dieron todo por mí, y ahora quiero devolverles ese amor y sacrificio”, dijo el joven, visiblemente emocionado.

Este gesto ha resonado profundamente en España, donde Alcaraz es visto como un ejemplo de talento, humildad y gratitud. Su historia inspira a muchos, recordándonos que el éxito no solo se mide en trofeos, sino en la capacidad de retribuir a quienes más importan. Con este acuerdo, Alcaraz no solo asegura la tranquilidad de sus padres, sino que también consolida su legado como un deportista con valores.

A medida que su carrera continúa en ascenso, con varios títulos de Grand Slam ya en su haber, el mundo espera con entusiasmo los próximos pasos de este prodigio del tenis. Por ahora, Alcaraz celebra una victoria más personal: darle a sus padres la paz que tanto merecen.